Este video tipo vlog fue pensado para mostrar una cara distinta del proyecto: auténtica, relajada y cercana. Nada de discursos, nada de poses. Solo personas reales compartiendo un momento al aire libre.

El reto fue lograr que se sintiera espontáneo sin perder el ritmo visual, así que optamos por una edición que mezcla planos naturales, tomas de apoyo con estética ligera y detalles que capturan la energía del día. El resultado: un contenido fresco que refuerza el sentido de comunidad, conexión con la naturaleza y disfrute sin filtros.

Más allá de ser un video de “diversión”, esta pieza cumple un objetivo claro dentro de la estrategia de contenido: humanizar la marca y construir vínculos emocionales con la audiencia mostrando lo que ocurre fuera del entorno formal.

El impacto fue inmediato: excelente rendimiento en vistas y engagement, y lo más importante, un aumento notable en las reservaciones para camping, reflejando que la conexión emocional también convierte.

En Pócima Studio creemos que las marcas no solo se posicionan por lo que ofrecen, sino también por lo que transmiten.

Y a veces, un día de campo puede comunicar más que mil campañas.